martes, 13 de mayo de 2014

EN LOWER RIVER

"Estaban casados: años compartidos, sufridos, sorteados, superados. Sí, en los que la felicidad no había escaseado..., pero él no podía pensar en nada específico. El matrimonio era una travesía sin llegada" (págs. 23-24).
Así comienza la historia de Ellis Hock, con el fin de su matrimonio después de treinta y tres años, y al acabar esta etapa llega a su memoria aquel tiempo vivido en África, cuatro años en Malaui como voluntario de los Cuerpos de Paz, cuatro años que pervivieron en su memoria como la época más feliz de su vida, una etapa pasada y que ahora no sólo llega a su memoria sino que siente que quiere volver a sentir, de manera que pone rumbo a Lower River, donde quizá esté ahora su felicidad ¿o no?
Ellis llega a su destino, un lugar que no puede ser más inaccesible y recóndito, y lo que allí se encuentra hace que su ánimo cambie de forma radical: "Todo le resultaba más caliente, polvoriento y desvencijado de lo que recordaba. No había nadie que tuviera nostalgia de los viejos tiempos: quedaban pocas personas con vida capaces de recordarlos" (pág.137). Aunque el lugar apenas ha cambiado en tres décadas, no queda nada en pie del Lower River que Ellis conoció en su juventud, incluso el carácter de las gentes de la aldea le resulta irreconocible, aquellos nativos voluntariosos, humildes y con ganas de salir adelante se han convertido en un puñado de vagos, engañifas y manipuladores, que dejan pasar las horas mientras entretienen al hambre entre helicóptero y helicóptero de la ayuda internacional. Ni siquiera Gala, aquella mujer que amó, conserva apenas la mirada de lo que fue.
Tampoco él es ya lo que era años antes, cuando tenía cierto estatus en la aldea por su condición de profesor. Ahora no es nadie, sólo les sirve mientras tenga dinero que entregarles, y esto angustia a Ellis sobremanera y, derrotado al ver que está atrapado en aquel lugar sin quizá poder retornar a su previsible y seguro entorno cotidiano piensa: "El mundo  continuará girando sin mí, y la noticia sobre mi infortunio pasará inadvertida, no dejará ninguna huella, porque no soy nada, apenas carne" (pág. 188)

Sin duda Ellis había idealizado una forma de vida, un lugar que en su juventud seguro que vio con otros ojos, pero también lo que encuentra es un motivo de reflexión para el lector: cómo ha evolucionado la aldea de Lower River quizá sea un ejemplo de lo que el llamado Primer Mundo está haciendo con el Tercer Mundo, no dejar que se desarrolle, a base de "regalarle" migajas que apenas nos suponen nada. No estimularles a querer mejorar, a tener estudios, un saneamiento adecuado en sus aldeas, un médico que los atienda... quizá no interesa, quizá no compensa económicamente porque en el fondo es el dinero el que mueve a este mundo en el que vivimos, no nos engañemos.
Vivimos poco a poco la evolución psicológica del protagonista absoluto de la historia, desde su llegada a África sintiéndose como el hijo pródigo que llega con riquezas para repartir a pasar una semana de asueto y de golpe y porrazo, sin habérselo esperado por un momento, se encuentra en un callejón sin salida, en un ambiente asfixiante en el que teme por su vida, del que desea y necesita salir, porque aquella África ya no está, Lower River no existe, las gentes han perdido para siempre su inocencia gracias a la incursión del hombre occidental, que no supo entender, no quiso saber.

«Si quiere conocer las zonas oscuras del ser humano, mejor lea a Paul Theroux.»
Alfonso García Villalba, El Faro de las Letras
«Oscuro y escalofriante relato de un mundo que se ha ido de madre... Una novela tejida a base de tensión que resulta ser un examen sorprendente de la naturaleza humana y de cómo ésta ataca, de manera brutal, aquello que considera “otro”.»
Philip Womack, The Telegraph
«En Lower River es apasionante en su forma de narrar una historia, y provocativa en su reflejo del escenario africano.»
Patrick McGrath, The New York Times

8 comentarios:

  1. Necesito otro tipo de lecturas en este momento. Besos.

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    1. Sin duda es una de esas lecturas a las que hay que buscar su momento, pero vale la pena, es un novelón!

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  2. La acabo de leer. Es adictiva, tremenda, impactante y da para la reflexión. Gracias y saludos¡

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    1. Celebro que también te gustase, es buenísima!! Gracias por pasarte, tienes un blog muy interesante. Saludos

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  3. Interesante novela, aunque sea de esas lecturas que hay que buscarle el momento adecuado para leerlas. Bss.

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  4. Huy, este me lo apunto que me ha encantado lo que cuentas aunque me temo que será durillo.

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