martes, 12 de julio de 2011

VINOSOBROSO, MEJOR EN VERANO




El pasado año en agosto decicimos hacer una escapadita veraniega, ya que no podíamos disfrutar de unas vacaciones, teníamos ya ganas de desconectar un poquito, así que haciéndolo coincidir con mi cumpleaños, nos regalamos un fin de semana recorriendo la zona de Mondariz.


VINOSOBROSO


Como sabéis, tenemos perro, algo que siempre condiciona nuestro alojamiento, y en esta ocasión elegimos la casa rural Vinosobroso.

La habitación que nos adjudicaron, como íbamos con nuestro niño y nuestro perro, nos comentaron que era la más grande con la que contaban. La verdad es que no pasamos demasiado tiempo dentro, pero resultaba bastante justita.

Parte de las habitaciones están ubicadas en una edificación moderna de planta baja, pero la nuestra estaba en la parte noble de la casa, por lo que tenía paredes de piedra. El interior estaba bastante bien restaurado y decorado con un estilo moderno. Digo bastante bien, porque el aislamiento dejaba bastante que desear y no se aguantaba sin el aire acondicionado puesto, cosa que en una casa de piedra no debería ocurrir.

Teníamos una cama de matrimonio de 1,35, dos mesillas, una de ellas sin luz de pie, la cuna del niño y una mesita redonda, además de armario. Dos de las cuatro bombillas de la habitación estaban fundidas, lo que no dice mucho de la labor de mantenimiento aquí.

La ducha no nos gustó nada en absoluto. No había plato, simplemente el azulejo del suelo tenía una leve inclinación hacia el desagüe, lo que suponía que se formara un inmenso charco en el cuarto de baño con cada ducha...

Como os comentaba, la casa tenía dos partes bien diferenciadas, una parte que sería la antigua casa de piedra y donde vivían los propietarios, además de la habitación en la que nos encontrábamos y la sala de desayunos, y una zona de reciente construcción en la que había más habitaciones.

En la sala de desayunos además se realizan habitualmente catas y cursos, por lo que hay muebles con copas de distintos tamaños. También una pequeña barra y una neverita con refrescos por si a algún huésped le apetece tomar algo durante su estancia, lo que resulta muy cómodo si, como nosotros, uno va en verano y está disfrutando de la piscina.

Los alrededores de la casa nos gustaron muchísimo, tuvimos ocasión de visitar Mondariz, el Castro de Troña, el Castillo de Sobroso y a la vuelta hacer una ruta por los Molinos de Folón y un paseo por Tui, así que la zona da para bastante.

La casa resulta de lo más tranquila por la noche, aunque tiene una carretera muy cerquita, la verdad es que no nos molestó el tráfico. Además tiene unas vistas preciosas de los montes con el Castillo de Sobroso al fondo.

Para terminar, comentaros que nos pareció bastante caro. Pagamos por una noche en régimen de alojamiento y desayuno, 90 euros... creo que la casa no los vale.

2 comentarios:

  1. La verdad es que a priori el sitio no tiene mala pinta, pero tienes razón con que es un poco caro...

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  2. Es extraño que siendo una casa antigua con paredes de madera no fuera fresca, ya que es una de las principales características de estas casas.Saludos

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