martes, 30 de diciembre de 2014

RESTAURANTE MANÉ. VALENÇA DO MINHO

Desde que tengo memoria, he ido a Valença do Minho, recuerdo esas pateadas con mi madre por el mercadillo que siempre se me hacían interminables pero que ella disfrutaba como una niña... Y siempre el colofón final era un buen homenaje culinario en este restaurante del que hoy os hablo, el Mané.  
Hacía tiempo que no comíamos aquí, porque en nuestros últimos viajes por esta zona lo encontramos cerrado. Me sorprendió ver que de aquel lugar inmenso solamente queda una pequeña salita, ni la quinta parte de lo que en su momento fue. Imagino que consecuencias inevitables de esta crisis que todos estamos padeciendo y que nuestros vecinos viven con especial intensidad.
Venir al Mané es pedir las especialidades de la casa. Dentro de su menú, compuesto por platos tradicionales portugueses, destacan y os recomiendo muchísimo, el Bacalhau Dourado y el arroz de marisco.
Y eso fue lo que pedimos, como está mandado.
La comida, como recordaba, deliciosa. El ambiente acogedor y muy tranquilo, incluso demasiado en un lugar en el que llegar sin reserva hacía casi imposible poder quedarse a comer.
No sé si se aprecia en las fotos, pero las raciones resultan más que abundantes. Si sois dos personas, os recomiendo un entrante (el caldo verde o la sopa de verduras) y un segundo para compartir, porque os aseguro que tendréis más que suficiente.
En nuestro caso éramos tres a la mesa y pedimos dos platos, acompañados de una cerveza para mi chico y un vinho verde Muralha para mí que por cierto me encantó.


A la hora de los postres nos quedamos algo chafados al comprobar que la mitad de la carta no estaba disponible, imagino que debido al escaso movimiento de clientes en época navideña, pero nunca nos había pasado aquí... Con un postre nos hubiera bastado porque el tamaño era enorme, pero mi peque se empeñó en pedir un postre sólo para él, que al final no le gustó y terminó con una naranja, así que los mayores nos tuvimos que comer un postre cada uno... Demasiado. El nombre del elegido, Montanha Russa, recomendado para muy amantes del dulce.




Como gran inconveniente en este restaurante, la escasa accesibilidad. Si uno tiene problemas de movilidad o va acompañado de un bebé en su carrito, la cantidad de escaleras que llevan al comedor serán un hándicap. Con la remodelación del local es posible ahora comer en la planta baja, donde está la cafetería, aunque resulta menos confortable.
La factura de nuestra comida, incluyendo el pan con mantequilla y una bebida para el peque, además de los platos que os he puesto y un par de cafés, ascendió a 53 euros, lo que me parece más que correcto teniendo en cuenta la calidad-cantidad, confort y atención.

Restaurante Mané
Av. Miguel Dantas, 5
Valença do Minho
manevalenca@clix.pt


lunes, 22 de diciembre de 2014

DESAYUNA GALICIA. O COTÓN. NEGREIRA

Nombre del local: O Cotón
Dirección: Calle Cachurra nº 7, bajo. Negreira
Horario de desayunos: De lunes a sábado desde las 8 y domingos desde las 10 de la mañana
Tipo de desayuno: Las opciones son escuetas. Por un precio único de 3,50 euros se nos ofrece la posibilidad de elegir para beber ColaCao, infusiones o café, como acompañamiento, además del zumo de naranja, tienen bizcocho casero, bollería variada, pulgas o tostadas. 
Tienen leche sin lactosa e infusiones ECO
Servicio y atención: El personal es muy amable y cordial. En cuanto al servicio a la mesa, resultó lento y con el error de que el café fuese lo primero en llegar, por lo que cuando el desayuno estuvo completo, el café ya estaba templado.
Tipo de Local: O Cotón es un café de siempre situado en el centro de Negreira, sencillo pero con buen café y excelente materia prima (las tostadas son de la afamada Panadería Xallas, bien conocida en toda la comarca). Nos encontraremos casi siempre a vecinos o trabajadores de la población, continuamente entrando y saliendo, un sitio bastante bullicioso.
Mi desayuno: Opté por pedir un café grande (es un tamaño más que generoso), un zumo de naranja y unas tostadas de pan "normal" (también tenían la opción del pan de molde, pero no de panadería, así que lo descarté).
No tomé el café todo lo calentito que me gustaría porque quería esperar a que estuviese todo el desayuno junto, por dos motivos, me gusta empezar por el zumo de naranja y además tenía que sacar la foto y no era plan de tener el café a medias!
Las tostadas tenían también un tamaño más que generoso y venían acompañadas de mantequilla y mermelada. No tomo mermelada y la mantequilla se me quedó un poco corta por el tamaño de las rebanadas, que venían recién hechas, calentitas y crujientes.
El desayuno estaba buenísimo, O Cotón es de lo más recomendable. El pan estaba tan bueno que pregunté de qué panadería lo traían, y no me sorprendió nada que fuese de Xallas, que también tiene despacho de pan en Negreira y Bertamiráns, si os animáis a comprar pan en esta zona.
Otros servicios: Hay conexión wifi y también terraza. Cuando estuve no había mesas, de forma que intuyo que no está todo el año, dependerá del tiempo meteorológico, me imagino.

Mi desayuno en O Cotón
Bollería y bizcocho casero (se pone también como tapa de cortesía con el café)



viernes, 19 de diciembre de 2014

LA LLUVIA ES UNA CANCIÓN SIN LETRA

Desde el blog de Laky, Libros que hay que leer, se organizó hace unas semanas una lectura conjunta y sorteo de ejemplares de la novela La lluvia es una canción sin letra. Tuve muchísima curiosidad porque la portada me entró por los ojos y el título me encantó. No había leído antes a Ángel Gil Cheza, que ya había publicado otra novela con el título El hombre que arreglaba las bicicletas, y para mí descubrir a un nuevo autor siempre es un aliciente. Tuve la suerte de que me tocase un ejemplar, así que agradecidísima a Laky y a Suma de Letras, pude participar en esta iniciativa.
"La lluvia toca sus notas sordas contra la hierba. Y somos pentagramas en blanco que rellenamos con notas sueltas que gotean de un beso, el sudor de un goce o una lágrima muda cuyo grito apagado es ahora una corchea salvaje e indomable como una joven pelirroja que levantaba espadas tan altas como ella y esparcía las tripas de sus enemigos de su pueblo por toda la isla de Irlanda. El amor es una putada, una bendición que trepa desde los pies a los genitales, que se abren como bulbos y se abrazan, llega al corazón, que, desprevenido, se rinde vencido sin parar de luchar, donde acaba anidando, como ave rapaz que es. Esta química tan sencilla fue la que desnudó a un joven nórdico, tan hermoso como una mujer y tan fuerte como una tormenta, de su coraza de combate, que lo mismo le protegía de un hacha enemiga que de una peligrosa caricia. La lluvia continuó con esa magia de pintar los campos verdes otros mil años. Un librero valenciano cree huir de la justicia pero se esconde de sí mismo, y descubre en una isla gris, verde y húmeda que somos de donde se nos quiere y no de donde venimos. La lluvia toca su canción y cada uno escribimos nuestra letra. A veces, con suerte, la melodía acompaña y nuestra letra es clara, precisa, como una mirada entre amantes que no saben decir mañana." (contraportada del libro)
En la novela nos encontramos dos tramas muy distantes en el tiempo, pero conectadas, aunque al principio no lo parezca, e incluso desoriente un poco (o al menos esto me ocurrió a mí). La trama que se desarrolla en presente, cuyo protagonista es un librero llamado Josep, y la que nos habla del pasado, de la época en que los vikingos habitaban Irlanda, con Thorgest y Eimear como protagonistas, más esta última.
Josep trabaja en el yacimiento en el que aparece el cuerpo de Eimear, una mujer vikinga de la que iremos conociendo su vida y sus circunstancias, así como su relación con un guerrero, Thorgest. Josep vive una vida en Irlanda totalmente alejado de su gente, y con unas relaciones bastante efímeras en su nueva ubicación, dado que, considerando que la justicia le persigue, tiene cierto temor a que se sepa sobre él más de lo debido.
He estado dos veces en Irlanda, y me ha gustado mucho la ambientación del autor de las calles de Dublín, de las gentes, los pubs, los paisajes, el clima con esa fina lluvia constante... Sin embargo, aunque el libro se lee con agrado y las historias están bien contadas, esta novela no me ha llegado como creí que lo haría. No me ha emocionado, me ha costado meterme en las historias porque en un principio no encontraba el nexo entre ambas y me perdía bastante, y aunque he pasado unos buenos ratos de lectura, no me ha dejado huella, no es un libro que vaya a recordar transcurridos unos meses.
Si buscáis una historia entretenida y os gusta la ambientación en tierras irlandesas, que como os digo, es fantástica, quizá esta pueda ser vuestra novela. Ya os adelanto que en esta lectura conjunta estoy siendo la nota discordante porque está gustando bastante, aunque ya sabéis... sería tan aburrido que a todos nos gustaran las mismas cosas...

miércoles, 17 de diciembre de 2014

LIBROS POR NAVIDAD

Si regaláis libros por estas fechas, algo que practico y recomiendo fervientemente, quizá os interese conocer dos novedades editoriales que me han parecido muy interesantes, cada una por diferentes motivos.
La escritora Mado Martínez, a la que seguramente conoceréis por haber sido galardonada con el Ateneo Joven de Sevilla este año con su novela de terror La Santa (que no he leído, pero sé que hace un guiño a nuestra gallega Santa Compaña...), nos propone conocer un poco más La Cocina de la Biblia

Tras este título encontraremos, guiados por el libro sagrado y estudios de la época, las costumbres a la hora de sentarse a la mesa ("La posición a la mesa era típicamente oriental (...) Esta era la costumbre tradicional, especialmente común entre los campesinos. (pág. 24), de atender a los invitados ("para ellos es una muestra de especial respeto que el dueño de la fiesta dé a los huéspedes algunas porciones de lo que tiene delante o insista en poner bocados o sopas en sus bocas con su propia mano" (pág. 26). Los alimentos habituales en la zona en aquel momento también tienen un papel importante en el libro, y dentro de esos alimentos, cuáles se podían comer o no de acuerdo con los textos sagrados; la alimentación judía y la de los israelitas.
¿Y qué mejor complemento en este libro de divulgación que las recetas de esos platos que se ponían a la mesa? El Pan de Pascua Sefardí, hummus de habas tiernas con menta, las lentejas de Jacob, vino especiado de Navidad... Y pueden hacerse en casa. Quizá alguno se anime a sorprender a los invitados con alguna propuesta original de las que aquí encontraréis.
Libro para curiosos de la cocina de otras épocas, fácil de leer y muy bien documentado. Está publicado por la editorial Cydonia, que además aporta el 5% del importe de cada ejemplar a una causa solidaria.

Mi segunda propuesta es un libro recientemente presentado en Compostela y del que os hablé el domingo en el programa radiofónico Come e Fala (tenéis el enlace en la columna izquierda del blog): 50 Cafés Históricos de España y Portugal
Fernando Franjo, periodista en El Correo Gallego, nos propone conocer un poco más estos establecimientos emblemáticos, su historia y sus historias y anécdotas; lugares en los que hubo en su día tertulias de intelectuales, donde se rodaron escenas cinematográficas o cafés que llegan a nuestra mente a través de la literatura y gracias a este libro ponemos imágenes: el Iruña en Bilbao, o el Café Gijón de Madrid son claros ejemplos de esto último.
"Abierto en 1982, hasta ese momento en ese local había desarrollado su actividad comercial la camisería Hisigar (...) Su verdadera originalidad es pues que sus propietarios han conservado su decoración y estructura, ya que al cambiar la naturaleza del anterior negocio solo se agregó el mobiliario y los complementos necesarios para convertir el local en un Café de época: mesas de mármol, veladores y sillas de madera, que perviven hasta la actualidad." (pág. 36) Café Real.Ourense.
"A Brasileira de O Chiado fue el primer Café lisboeta en servir la tradicional bica, equivalente al expreso italiano. Existe una leyenda que explica esta denominación. Al encontrar muy amargos los primeros cafés, el propietario del Café inventó una especie de eslogan "Beba isto com açúcar", que reducido a sus iniciales se generalizó con el nombre de bica." (pág. 134) Café A Brasileira. Lisboa.
Una lectura para cafeteros y amantes de esos lugares con personalidad propia que son en sí mismos un buen motivo para entrar, disfrutar de esa atmósfera especial y de paso tomar un buen café.

jueves, 11 de diciembre de 2014

SECRETOS DEL ARENAL

Foto de www.elnortedecastilla.es
El primer libro que leí de Félix Modroño fue La Ciudad de los Ojos Grises, una novela que además de descubrirme la historia fascinante de la ciudad de Bilbao, me descubrió al gran escritor que es Félix. Con Secretos del Arenal acaba de ser reconocido con el XLVI Premio Ateneo de Sevilla, un premio literario que, por las obras que he leído hasta ahora, reconoce novelas de gran calidad como es este caso. Aquellos que seáis reticentes a leer libros premiados, no os privéis de esta maravillosa historia que Félix Modroño nos ofrece.
Olalla y Silvia son dos mujeres protagonistas de dos historias separadas cientos de kilómetros y varias décadas, pero que irán confluyendo conforme va avanzando la historia narrada en el presente, la de Silvia, encajando perfectamente ambas gracias a una novela que cuenta la vida en la Sevilla de la posguerra, la lucha por sobrevivir sorteando traiciones, intrigas y hambre a partes iguales.
Ambas protagonistas (más protagonista Silvia que Olalla), viven episodios durísimos en sus vidas y ambas tienen un amor masculino, apenas un juego de niños en el caso de Olalla, y una pasión desenfrenada con Mateo en el caso de Silvia. La ambientación en tiempo y espacio impecable hará que, junto con dos personalidades muy bien definidas, el lector enseguida se meta de lleno en las dos historias. La profesión de Mateo, experto catador de vinos, nos hace sumergirnos también en un mundo interesantísimo como es el de la enología, llevándonos a distintos puntos de España y dando pinceladas del mundo de la cata, las bodegas... con esa sensibilidad poética que caracteriza a Félix Modroño y esa documentación impecable de todos los temas que trata.

" El olor es el sentido más espontáneo. Por eso, un aroma es capaz de trasladarnos a cualquier momento de nuestra vida o cualquier lugar. Una tostada con mantequilla y miel me transporta a mi infancia, y una tortilla cocinada sobre un camal a los meses que viví en México. Estoy seguro de que, por alguna misteriosa razón, captamos las células olfativas por la nariz, pero se impregnan en la sangre para conducirlas a nuestro corazón" (pág. 28)

La relación de Silvia y Mateo resulta muy peculiar, son dos personas que apenas se ven un par de veces al año, que no interfieren el uno en la vida del otro, lo justo para evitar la rutina, y cuando se encuentran dan rienda suelta a un deseo carnal muy explosivo y que Félix relata sin caer en las frases tópicas y manidas que muchas veces se encuentran cuando se leen escenas eróticas, en absoluto fáciles de narrar a mi modo de ver.

"Aquellas fueron nuestras últimas palabras esa noche. A los pocos segundos, los reflejos del fuego doraban nuestros cuerpos desnudos sobre una manta. Nos lamimos, nos mordimos, nos besamos, nos bebimos hasta quedarnos sin una gota de saliva. Fuimos del suelo al sofá y del sofá a la cama sin despegarnos un instante. Y es que si el ansia nos domina, la piel no se sacia" (pág. 281)

Es una verdadera delicia tener una novela de este escritor entre las manos, me declaro absolutamente admiradora y espero que llegue pronto otra historia narrada por su pluma. Merecido reconocimento con el premio literario y espero y deseo que también por parte de los lectores.

"Los momentos más gratificantes no se compran con dinero, sino con tiempo. Aunque eso es algo que nadie aprende de joven porque creemos que los consejos en ese sentido proceden más de viejos o de fracasados que de sabios. La gente consume su vida asumiendo responsabilidades de las que resulta imposible escapar, incluso si llega un día en el que decide eludirlas, y descubre que ya es demasiado tarde, condenándose en una cárcel donde no existe el futuro." (pág. 282)

martes, 2 de diciembre de 2014

LA MARCA DE LA LUNA

La marca de la luna es una marca de mujer, una marca con la que Lila ha nacido y descubrirá que significa que es alguien muy especial, al igual que otras mujeres de su familia, como su abuela Asha, que ha de hacerse cargo de ella al fallecer su madre en el parto. Las mujeres con esta marca tienen magia, una magia que han de aprender a manejar y a controlar, y una maldición que arrastran desde que se recuerda... 
El país que ve nacer a Lila es la India, un lugar en el que la vida de los pobres no es fácil, y se complica más aún cuando se nace mujer. De la mano de Amelia Noguera estamos allí, rodeados de color, con un sabor picante en la boca, con los pies mojados por la lluvia y por todas partes viendo niños correteando medio desnudos pero felices y escuchando las leyendas del país de los mil dioses.
"Desde un rincón, casi acurrucada en el suelo para que nadie reparara en mí y no pudieran echarme sin contemplaciones, observé emocionada cómo cubrían las palmas de sus manos y pies con dibujos en henna de delicadas flores de madreselva, peinaban sus largas melenas con cepillos de plata bruñida y les pintaban la cara: sus ojos y sus labios me parecieron entonces los más hermosos que había visto nunca" (pág.78)
Es una delicia leer a Amelia, que nos relata con mucho rigor y más sensiblidad un ambiente muy especial y una época complicada, como es la inmediatamente anterior a la II Guerra Mundial.
La muerte de Asha supone un giro radical en la vida de Lila, que se traslada a Praga con una familia que la acoge como si fuera su propia hija, un choque brutal para una niña que hasta entonces no se había puesto unos zapatos, que no había sentido el frío en su piel y que no había pisado un colegio, y un choque de culturas que hacen que Lila resulte todavía más especial y que esa educación, esa cultura que ella vivió de pequeña la hagan ser muy diferente y llevar las situaciones mucho mejor que los demás. Su madre adoptiva encuentra en ella un apoyo muy grande, y Lila va creciendo adaptándose a su nueva vida en una ciudad invadida por los nazis y en la que conoceremos el importante papel de la legación española en aquel entonces.
El periplo vital termina en la ciudad de Sevilla, donde una Lila ya mayor cuenta a su nieta la historia de su familia y el por qué de esa marca tan especial en su vientre.
A lo largo de la novela iremos siguiendo una narración en la que la historia y la vida cotidiana se mezclan con gran maestría, cuyo ritmo va en aumento conforme vamos avanzando y la acción gana en emociones. Es una auténtica maravilla leer a Amelia Noguera, que si con La Pintora de Estrellas me había convencido, con La Marca de la Luna me ha conquistado absolutamente, una novela para leer con los cinco sentidos.

Amelia Noguera, en el centro. Foto de www.todoliteratura.es
Amelia nos cuenta en su blog  "Escribo porque inventarme otros mundos me obliga a pensar en este y a intentar entenderlo; porque imaginar la vida ficticia de otros me lleva a valorar más la mía; porque comprender a los personajes que creo para que sean verosímiles me obliga a ponerme en el lugar de las personas reales, con quienes me relaciono cada día, a verles tal como son y no como me gustaría que fueran. Porque el mundo, después de haber intentado escribir una buena novela, se me muestra de verdad. Escribiendo te das cuenta de que los temas fundamentales son siempre los mismos: el amor, el sufrimiento y la desigualdad."
Ha escrito cuatro novelas, todas ellas publicadas en digital y que irán viendo la luz en papel: La pintora de estrellas, Escrita en tu nombre y Prométeme que serás delfín, a partir de 2015 de la mano de Suma de Letras, y La marca de la luna, que publica Roca Editorial.